Vives cerca de una avenida o en una zona con mucho movimiento y ya no sabes cómo escapar del ruido?

No estás solo: el ruido urbano es una de las principales causas de estrés, insomnio y falta de concentración en el hogar.

La buena noticia es que no necesitas hacer una gran remodelación para volver a tener tranquilidad.

Aquí te compartimos algunas soluciones prácticas y efectivas

1. Revisa tus ventanas: el punto más débil del ruido

El 80% del sonido exterior entra por las ventanas,  si tus marcos son de aluminio delgado o tienen vidrios sencillos, el ruido pasa fácilmente.

Solución: instala ventanas acústicas o de control de ruido, que combinan vidrios laminados y sellos herméticos para bloquear las vibraciones sonoras.

2. Refuerza los sellos de puertas y rendijas

Los pequeños espacios entre puertas o marcos son una autopista para el sonido, Usa burletes o sellos de caucho (económicos y fáciles de instalar).

3. Agrega materiales absorbentes

Cortinas gruesas, tapetes o paneles decorativos ayudan a reducir la reverberación interior, Cada superficie blanda absorbe parte del ruido que entra.

4. Crea un “rincón silencioso”

Si el ruido viene de un solo lado (por ejemplo, la calle), ubica tus espacios de descanso o trabajo al lado opuesto, Un pequeño cambio en la distribución puede marcar la diferencia.

Conclusión

No necesitas tumbar paredes para recuperar la tranquilidad, con pequeños ajustes y especialmente con ventanas diseñadas para aislar el ruido, puedes transformar tu hogar en un espacio silencioso y confortable.

En Vidrios y Fachadas instalamos ventanas acústicas que combinan estética y tecnología para reducir el ruido hasta en un 70%.